El 6 de octubre de 1974, por la 12ª fecha del Torneo Nacional, Banfield le ganó 13-1 a Puerto Comercial de Ingeniero White con 7 goles de Juan Alberto Taverna. Ambos récords siguen vigentes en el fútbol argentino.
Los registros oficiales de la AFA dicen que apenas 1.539 personas pagaron la entrada para ser, sin calcularlo, testigos de la historia. Se estima, no obstante, que la concurrencia, si se computa el ingreso de socios y colados, llegó a los 5 mil. Aquella tarde, con poco más de 10 mil pesos como producto de la recaudación, el estadio Florencio Sola —que había sido inaugurado otro 6 de octubre, pero de 1940 (derrota por 1-0 con Independiente, con gol del paraguayo Arsenio Erico)—, fue el escenario de un episodio sin igual en el fútbol profesional de la Argentina: Banfield le ganó 13 a 1 a Puerto Comercial de Ingeniero White y estableció el récord de la mayor goleada desde que en 1931 se organizaron los torneos rentados en el país. También pasó a la posteridad la tarea de Juan Alberto Taverna, que marcó siete de los 13 tantos y se convirtió también en el máximo anotador en un mismo partido. Todo eso sucedió en un partido válido por la 12ª fecha del grupo A del extinto Torneo Nacional.
Puerto Comercial, campeón de la Liga del Sur, se enfrentaba por primera vez con los grandes del fútbol argentino. Con la prioridad de destacarse en la competencia local, presentó una formación alternativa para el torneo Nacional, una apuesta que le costaría caro: el equipo terminó perdiendo 16 de sus 18 partidos, recibiendo 75 goles en total, un promedio de cuatro por partido. Entre esas derrotas, la sufrida en Peña y Arenales fue la más devastadora.
Para Puerto Comercial, aquel Nacional de 1974 fue una experiencia amarga. No obstante, a pesar de la histórica goleada sufrida en Banfield, el equipo logró levantar cabeza al derrotar a All Boys en la fecha siguiente, un triunfo que les permitió sacudirse el peso de la derrota más dolorosa de su historia.
Los récords que se forjaron en 90 minutos
Con cinco goles anotados en el primer tiempo, Juan Alberto Taverna ya había igualado el récord de Arsenio Erico, Jaime Sarlanga y Rafael Domingo Moreno, quienes habían marcado seis goles en un mismo partido. Sin embargo, su objetivo era romper esa marca, y lo lograría con su sexto gol a los 87 minutos. Su hazaña no terminó ahí: en el tiempo adicional, el árbitro Roberto Goicoechea sancionó un penal, y Taverna lo convirtió para sumar su séptimo tanto, sentenciando así el 13-1 definitivo.
Un hito menospreciado en su momento
A pesar de la contundencia de la victoria y de los récords que se rompieron, el partido no fue tratado con el impacto mediático que merecía. Las crónicas deportivas de la época apenas mencionaron la goleada, y en muchos casos, omitieron destacar los hitos alcanzados por Banfield y Taverna. La atención se centró en los partidos entre los denominados “grandes”, lo que relegó el 13-1 a un segundo plano.
No obstante, en el Taladro, la hazaña quedó grabada a fuego. Aquel equipo, dirigido por Héctor D’Angelo y con figuras como Ricardo La Volpe en el arco, no llegó mucho más lejos en el torneo, pero dejó una huella imborrable. Tras el histórico partido, Taverna solo jugó dos encuentros más antes de verse envuelto en un episodio de doping, el primero registrado oficialmente en el fútbol argentino.
La síntesis del partido
Banfield (13): Ricardo La Volpe; Eduardo Pipastrelli, José Romero, José Terzaghi y Raúl Giustozzi; Silvio Sotelo, Hugo Mateos (Ricardo Girado) y Rubén Flotta; Enrique Lanza, Juan Taverna y Luis Roselli. DT: Héctor D'Angelo.
Puerto Comercial (1): Juan Tolú; César Colman (Contardi), Raúl Lugones (Rubén Viani), Osvaldo Baley y Núñez; Mario Rachi, Enrique Dekker y Solís; Jalil, Juan Carlos Nani y Diego Romero. DT: Rufino Bugarini. Goles en el primer tiempo: 5m, 7m, 31m, 37m y 39m Taverna (B), el primero de penal; 11m Lanza (B); 15m Roselli (B) Goles en el segundo tiempo: 2m José Romero (B); 7m Lanza (B); 13m Rachi (PC); 16m Roselli (B); 26m Pipastrelli (B); 42m y 43m Taverna (B), el segundo de penal.
Cancha: Banfield.
Árbitro: Roberto Goicoechea.
Fuente y foto: www.clarin.com